UTOPÍAS CON MELANCOLÍA

UN PEQUEÑO LUGAR PARA SUBLIMAR, PROYECTAR Y TRANSFORMAR TODAS AQUELLAS PALABRAS EN SENTIMIENTOS Y EMOCIONES INIMAGINABLES TENIENDO COMO PRINCIPAL COMPLICE AL INCONSCIENTE

La fractura permanecía en mi corazón. "Es cuestión de confianza" me dijiste y en mi cabeza daba vueltas y vueltas como un carrusel. Los problemas se incrementaban y ella estaba sumergida.
Cansada de las palabras, de las lágrimas y del dolor, poco a poco fui recuperando lo que me pertenecía: sueños, ideas, anhelos, esperanza, valor, seguridad, pero sobre todo: amor. Necesitaba tomar un camino, y fue el siguiente: resistir el golpe y preservar el amor.
La primera semana del mes va concluyendo, pero no la plenitud que siento al ver tus ojos claros. El mes de los problemas acaba de morir, pero no morirá el amor que siento por ti. El camino se retomó, volvemos a caminar juntos.
No me he equivocado, eres mi personita, eres mi chico y eres mi amor con el cual quiero continuar compartiendo sueños en la cama y en la realidad. Sigamos con los planes, con los besos, con el amor.
Soy feliz nuevamente contigo, no lo arruinemos. El mundo se vuelve a detener al sentirte en mi cuerpo y en mi alma.
Hoy creo en tus ojos, en tus caricias y en tus labios. Creo que la felicidad vuelve a respirar. Creo en ti y en mi. no hay duda, las lágrimas van al cielo, el corazón sanó. Creo que la confianza regreso para nosotros, no es cuestión de tiempo es cuestión de amor.

Viernes 30 por la tarde esperando durante más de una hora y tú no llegabas las lágrimas escurrieron por mi rostro, un maldito presentimiento invadía mis venas, temía que la gente viera el dolor de mi rostro. Ese día, tus labios sabían distintos, no eras el mismo, tu distancia con mi cuerpo y mi alma se hizo presente. Sabía que sucedía algo. Y después de una semana supe quien era ella.

Hace tiempo que el corazón no sabía lo que era el dolor, al parecer ya se había olvidado de como sentir dolor, pero a partir de ese día del mes de Octubre recordó lo olvidado. Fue tan grave el dolor que los pensamientos, los impulsos y la realidad se acercaban más hacía el tanatos.

Palabras y palabras surgieron del corazón; Disculpas por los errores que nos hacen cometer los estragos de las drogas. Pero ella seguía ahí, burlándose. ¿Será verdad? Eso era lo más probable. ¿Qué hacer?, era la pregunta en turno. Después de una tarde y sin más preámbulos decidí y le pedí que no nos vendiéramos más simulacros (como dice Mario Benedetti), le di varias opciones, una de ellas terminar, porque no sirve de nada continuar si había alguien más quien ocupe ese espacio vacío en su cama y en su alma. Le dí un consejo: Ojalá sea más bonita, más inteligente y que te llene completamente. No dijo palabra alguna, sólo me abrazo y me beso; con el tiempo he aprendido que eso significa algo favorable, continuamos, pero sólo unas cuantas horas, porque al día siguiente después de una maravillosa tarde, su rostro decía que estaba aburrido y harto, tal vez de mí. Hablé nuevamente, pregunte lo qué sucedía, no contestabas, te volví a dar la opción de no continuar, y te conté lo que alguna vez pasó por mi cabeza, ya que sabía que tarde o temprano alguien iba a parecer en tu vida. "Hace un mes pensé que era mejor darnos tiempo" tus ojos se llenaron de lágrimas saladas, las querias esconder, pero no podías. Decidimos seguir juntos, decidimos volver a ser felices como antes: despedirnos con un beso y una sonrisa, vivir con alegrias, reir hasta no más poder y continuar amandonos.
La gente insiste en involucrarse, en hablar de más, en emitir juicios y pretender en ayudar, pero no sé si para que estemos juntos o para que nos separemos.
Ese viernes 30 de Octubre apareció una grieta en mi corazón y se volvió fractura cuando decidiste que ella, formara parte de esta historia... ¿Qué hacer?