UTOPÍAS CON MELANCOLÍA

UN PEQUEÑO LUGAR PARA SUBLIMAR, PROYECTAR Y TRANSFORMAR TODAS AQUELLAS PALABRAS EN SENTIMIENTOS Y EMOCIONES INIMAGINABLES TENIENDO COMO PRINCIPAL COMPLICE AL INCONSCIENTE

Estar enamorada no es fácil, no basta con desearlo hay que sentirlo...



Cuando caí en el abismo, en la oscuridad de la soledad, fueron tus labios junto con tu sonrisa que me tomaron del corazón y me hicieron ver la luz de la esperanza y del amor.



Ese primer beso en aquel recinto que resguarda las artes y que mantiene la ilusión de la actriz, fue ideal para dejarme entre ver en tus ojos una sensación de alegría por sentir nuestros labios entrelazados. Ese día regrese a casa con algo más que una sonrisa, algo en mi alma habías despertado.



Un mes, dos meses pasaron para que tu cuerpo se fundiera en calor con el mío...



Aquella tarde de Julio deseaba tanto que me sonrieras mientras escribíamos nuestro aroma en nuestros cuerpos.



Durante ese mes recorrimos más de una alcoba para dejarnos llevar entre los senderos de lo terrenal y lo divino.



La semana se esta alargando y apenas es martes...

Desde la semana pasada, para ser más precisa el jueves en la mañana, me sentí diferente, sentí que mi alma abandonaba mi cuerpo, y no fue que hubiera estado dormida, fue durante la vigilia. Pensé que era por la emoción de lo que sucedería en la tarde.

En la noche, después de pasar una increíble tarde con el chico de los ojos pequeños y de las grandes palabras, llegue a casa; aquella que parecía borrosa, pensé que era a causa de la droga que invadía mi cuerpo, es decir, por el amor, y si era así pero no del todo, volví a reflexionar y deduje que era a causa del efecto de esos tragos de más.

En la mañana siguiente desperté con una gran sensación en mi cuerpo: había descansado.

Llego el fin de semana, por primera vez después de largos meses decidí pasarlos fuera de la ciudad con la familia. En esos días, volvió la sensación de que lo que vivía era parte de un sueño, no le tomé mucha importancia, porque sucedió un desprendimiento en la vida de mi padre. Creo que su lesión va más allá de su decidía y descuido, pienso que es una forma de querer quedarse en un tiempo y no seguir caminando, de no correr rumbo a la vejez, sin embargo, lo está haciendo más rápido. Todo mundo hablaba esos días, no tenía palabra alguna, me quede atónita y volví a sentirme en un mundo irreal. En la noche antes de dormir y mientras fumaba, esperaba que mi padre llegará sin decir nada -como siempre- pero no fue así...

Lunes por la mañana regresa la sensación al estar sentada pensando y conviniéndome de que por algo pasan las cosas, por algo estoy ahí y leyendo algo que me haga recordar que mi trabajo real es estudiar la complejidad de la psique. No quiero quedarme sentada esperando a la nada. En la noche, una lágrima corrió por mis mejillas, aquella gota de agua era de cansancio y de empatía.

Martes por la mañana, pienso que será un buen día, que pronto llegara el viernes e iré al cine, que pronto mi padre volverá y yo tendré que encontrar un trabajo. Empieza a amanecer, el sol me da en la espalda. La tarde llega y me dice que será un poco agotante. La noche me acompaña, trato de reflexionar lo sucedido, pero no recuerdo mucho, todo parece parte de una historia que no es la mía, la tarde parece un recuerdo lejano. Creo que mi inconsciente me juega una broma.

La realidad es esta, pero no logro distinguir la realidad con mi vida onírica.
¿Qúé es real? ¿Qué sucede?

Es tarde e ire a dormir, no quiero soñar esta noche, porque mañana me tocará soñar sin dormir.

Esto del amor, a veces no se dice, aveces no se oye, sólo se siente.
Estás dos últimas semanas ha aparecido un sentimiento algo extraño, no es nuevo, pero es inquietante.
Mi histeria se incrementa, ¿Qué pensar? no quiero que regrese la tristeza en su plenitud, no quiero la desepción me tome por sorpresa, aunque no sería sorpresa, ya que siento venir el dolor, las señales incrementan.
La esperanza dice que espere, que no adelante, que es un amor nuevo, que estoy loca. Pero que más loca puedo estar si él ya no me busca como antes, que se desaparece, que el ineterés lo ha perdido.
Quisiera llamarle y decirle lo que pienso, decirle lo que presiento y siento. Trato de pensar en mi disrcurso, algo tranquilo y no fatal, pero al final las lágrimas pueden más y prefiero guardar la calma hasta lo más oscuro del ropero.
Trato de tranquilizarme de pensar en que cada quien tiene una vida y sus problemas, pienso que sólo tiene poca edad, que no lo justifica pero le ayuda.
Deseo ser más clara en mis emociones, pero a veces no puedo, quisiera no sentir esto en el corazón. Sabia que esto podia pasar, aun así, le aposte nuevamente al amor, porque él me mostró un corazón sicero, humilde y con ganas de amar, él me llevo a los rincones más maravillosos del amor, aun tiemblo cuando veo sus ojos y beso sus labios, le aposte a él porque sentí el amor, esperando sólo honestidad. Gracias por esos momentos, eres lo que había soñado...eres mi chico musico, el Dios del centro de mi cuerpo, mi amor.
Mi corazón se parte al pensar que él ya no me quiere, que fui algo pasajero, algo sin importancia, pensar que sus palabras fueron pintadas por momentos.
Ya no sé que sentir, estoy complemente triste. Sólo me queda esperar a ver sus ojos y decirle todo:

Te amo mi hermoso chico trovador. Te amo infinitamente.